lunes, 12 de marzo de 2012

Historias Cruzadas


Hace poco vi la película Historias Cruzadas, que trata sobre la relación entre empleadas domésticas afro(norte)americanas y sus empleadoras blancas en un pueblo del estado de Mississipi en la década de 1960. Una joven aspirante a escritora quiere mostrar la realidad del lugar desde la visión de las trabajadoras negras, y para ello debe convencerlas de que le cuenten sus experiencias -lo que implica un contacto interracial y una actividad subversivas para la época. 
La recomiendo, pese a los reparos que le realizan especialistas en el tema. En un país como el nuestro, con poco acceso a material sobre la temática específica, ilustra y brinda un panorama interesante (y matizado) sobre la relación dominador-subalterno. Uno adquiere una visión “desde adentro” sobre las relaciones raciales de la época que de otra manera no tendría, y que sirve también para pensar cómo habrá sido aquí cuando trabajar como empleada doméstica era una salida laboral común para las afroargentinas. Para algunas lo sigue siendo, claro….


No puedo dejar de mencionar, sin embargo, que la Association of Black Women Historians de EEUU emitió un comunicado bastante crítico tanto de la película como del libro en que se basa (The Help, de Kathryn Stockett, que fue escrito recién en el 2009 ). 
Según las historiadoras, la película y el libro “distorsionan, ignoran, trivializan las experiencias de las trabajadoras domésticas negras”. Ayudarían a revivir el estereotipo de Mammy, la nodriza negra que cría a los niños blancos, siempre representada como “asexual, leal y feliz” y cuya popularidad lleva a ignorar el racismo estructural que confinaba a las mujeres negras a un trabajo duro y malpago. Por causa de la segregación racial y las asimetrías socio-económicas, el 90% de las mujeres negras de la época no podía trabajar de otra cosa. Además de esta apreciación general, hay dos críticas adicionales muy específicas. La primera es que la película no muestra los muy reales y frecuentes problemas de acoso sexual que enfrentaban las afro-norteamericanas en las casas de sus empleadores blancos. La segunda, que “no reconocen la comunidad negra” que muestra la película, ya que en ella “casi todos los hombres negros son presentados como borrachos, abusadores o ausentes”. La falta de una contextualización adecuada lleva, también, a insuficientes referencias al movimiento por los Derechos Civiles y a la ausencia en la película del Ku Klux Klan, una herramienta de terror que obviamente era más peligrosa que las empleadoras racistas que protagonizan la película.
A favor de Historias Cruzadas, debo decir que claramente trata sobre las relaciones entre mujeres, y que quizás por ello tanto la presencia de los hombres negros como de los blancos sea insuficiente. Como énfasis, aunque ciertamente limitativo, no deja de ser interesante y bienvenido. En términos de Bart Simpson, no es tan ñona como parece por las fotos, y da unas buenas horas (dos y media, que no se notan tanto) de entretenimiento y educación.

Fuente de las fotos (también hay una crítica más severa a la que no le falta razón, pero para mí la película igual funciona):
http://cinemarama.wordpress.com/2012/01/13/historias-cruzadas-the-help-2/
El comunicado de la Association of Black Women Historians (ABWH) (en inglés):
http://www.abwh.org/index.php?option=com_content&view=article&id=2:open-statement-the-help%E2%80%A6

(Indoamericanas) Los Qom ante la Corte Suprema...

Al igual que Wainfeld, no sé qué saldrá de ésto, pero me parece un hecho importante...

Foto: CIJ - Diario Perfil

De la nota de Mario Wainfeld en Página 12 de ayer:
"El gobierno de Formosa y representantes de la Comunidad La Primavera participaron, frente a frente, de una audiencia pública convocada por la Corte Suprema. La escena es auspiciosa y novedosa: Félix Díaz, el referente de la comunidad qom, defendiendo sus derechos cara a cara con funcionarios del gobierno provincial que los maltrata y avasalla sus derechos. El gobernador Gildo Insfrán estaba citado. En uso de prerrogativas procesales delegó en el Fiscal de Estado y un ministro. Sus voceros hicieron papelón. Aburrieron (y no convencieron) explayándose en elogios a la política formoseña con las comunidades originarias. Alegaron amnesia o desconocimiento cuando se les preguntó si la provincia disponía de tierras fiscales para recolocar un predio asignado a la Universidad, justo en las tierras que reivindican los integrantes de La Primavera. Los jueces Ricardo Lorenzetti y Eugenio Raúl Zaffaroni soportaron la perorata, pero no sucumbieron a su ansia chicanera: los pusieron en apuros con preguntas incisivas. La paridad ante la ley se expresó en un Tribunal atento a la diferencia real de poder entre las partes. La Sala de Audiencias de un Poder usualmente chúcaro para ceder espacio a gentes de a pie dio volumen a una experiencia sin precedentes, inaugurada por la actual composición de la Corte.
El avance de la causa tiene sus bemoles. La Corte no tiene facultades para dictar una sentencia coercitiva para las partes. Un recurso trillado, reenviar el expediente a la Justicia formoseña, así fuera con recomendaciones severas, dejaría desamparada a la Comunidad La Primavera. El Tribunal deberá imaginar con creatividad un mecanismo más potente. De cualquier manera, la audiencia en sí misma es un hecho político reparador, que también debe movilizar a otros poderes del Estado."