jueves, 20 de diciembre de 2007

Desalojo del Movimiento Afrocultural

En ocasiones uno piensa, algo ingenuamente, que las cosas pueden haber cambiado para bien. Que la preocupación de algunas personas o de algún organismo gubernamental por la situación y la cultura de los afrodescendientes implica, de alguna manera, un cambio más general al respecto. De la misma manera, que la aparición de un par de notas en medios gráficas también podría indicar una tendencia creciente de re-visibilización.

Nada de esto pareció confirmarse hace un par de días cuando, preocupado ante el ya inminente desalojo del Movimiento Afrocultural (ver fotos en entrada QUILOMBO URBANO) mandé la carta que reproduzco abajo a Clarín, Página 12 y La Nación. Además de mandarla a los correos de lectores, intenté con la sección sociedad de Página y se la envié también a tres periodistas (uno en cada diario) que me habían entrevistado por el tema de la cultura negra. Hasta el momento no apareció nada en la prensa.


Desalojan al último Quilombo

Como investigador de hace más de veinte años de la cultura negra en el Cono Sur, quiero expresar mi profunda preocupación porque uno de los espacios de cultura popular más especiales de Buenos Aires está por desaparecer. El MOVIMIENTO AFRO CULTURAL, una ONG de rescate y difusión de la cultura afro que funciona en un galpón abandonado de la calle Herrera 313, será desalojado este jueves por orden judicial. Los fundadores del Movimiento Afrocultural tienen una larga y fecunda historia de reivindicación y difusión de la cultura afro-rioplatense. Funcionando desde fines de la década de 1980 como Grupo Cultural Afro , fueron los pioneros en la enseñanza del candombe que hoy cultivan numerosas comparsas en nuestra ciudad. Uno de sus miembros originales, José Delfín Acosta, fue asesinado por defender los derechos de afrodescendientes, y su hermano Angel debió exiliarse en España por intentar llevar a juicio a los culpables. Diego y José Bonga, también afrodescendientes y sobrevivientes del grupo original, recuperaron un galpón abandonado de Constitución para formar la mejor comparsa de candombe de la ciudad y enseñar capoeira, percusión y danza afro a porteños de toda condición social. Como parte de su trabajo de concientización social, realizaban conferencias y proyectaban películas sobre la historia y la cultura afroamericana. En el lugar viven, además, varias familias afrodescendientes que de prosperar el desalojo quedarán en la calle. La historia parece volver a repetirse: no hay espacio en nuestras sociedades para quilombos de negros.
Dr. Alejandro Frigerio, antropólogo e investigador del CONICET
Mas información:
hermandadbonga@hotmail.com
Movimiento Afrocultural: 4361-5944 / 15-6131-9235